En Europa el jabalí ha experimentado durante las últimas décadas una intensa expansión, recolonizando zonas de las que se había extinguido. Estos mamíferos están cada vez más habituados al ser humano.
La abundancia de jabalíes en nuestros cotos puede conllevar a la trasmisión de diversos riesgos sanitarios principalmente para el ganado doméstico. Su control poblacional supone uno de los pilares claves para minimizar y controlar las enfermedades que puedan transmitir. Su sobrepoblación está ocasionando serios problemas en explotaciones agrícolas y ganaderas, en entornos urbanos y en la seguridad vial, además de suponer una amenaza en la conservación de diversas especies.
La actividad cinegética se usa como herramienta para el control poblacional de esta especie, promoviéndose así una mejora en las infraestructuras ligadas a las personas, con una reducción de accidentes de tráfico, menor avistamiento en poblaciones urbanas y mejora en la sanidad del ganado doméstico. Además de ser una importante fuente de ingresos económicos a nivel nacional, que promueve innumerables puestos de trabajo.