La majestuosidad de cazar perdices en Extremadura
Domingo, 25 Mayo 2025

Extremadura se alza como santuario de la caza menor, donde el tiempo se detiene, y cada jornada se convierte en una historia que arderá con emoción junto a la lumbre. Los cazadores no solo buscan abatir perdices, sino sentir el alma del campo, escuchar el silencio que precede a la muestra de sus perros y vivir la emoción cuando la perdiz roja rompe el aire con su vuelo salvaje. Cada disparo, cada muestra, cada cobro, es un verso en la eterna canción del cazador. Aquí, la caza es legado, pasión y comunión con la naturaleza.
Cazar perdices de vuelo fugaz exige más que puntería: requiere una perfecta sincronía con el perro, un encare rápido y natural, reflejos certeros y un disparo casi instintivo. No siempre se dispara cuando la pieza rompe, hay que saber cuándo esperar ese segundo preciso para acertar con elegancia y eficacia.