Los procesos vivos son procesos cíclicos y están sometidos a cuestiones cósmicas. Evidentemente a la hora de cultivar no iba a ser distinto. Hay que tener en cuenta las cuatro fases lunares y su paso bajo las diferentes constelaciones porque afectará a los cultivos y a las diferentes partes de las plantas.
Si la luna pasa bajo las constelaciones de Aries, Leo y Sagitario (signos de fuego) es el momento idóneo para trabajar cultivos de frutas y semillas. A su paso bajo Tauro, Virgo y Capricornio (signos de tierra), las energías cósmicas influyen en cultivos de raíces y cortezas. Cuando la luna pasa por debajo de las constelaciones de Géminis, Libra y Acuario (signos de aire), es el momento para el cultivo de flores y plantas ornamentales en general y finalmente cuando pasa bajo las constelaciones de Cáncer, Escorpio y Piscis (signos de agua) es el momento para los cultivos de hojas y todas las labores que tengan que ver con estos cultivos.
Recordemos que la luna tiene un ciclo de 28 días dividido en cuatro fases. Dependiendo de la fase lunar también tendremos en cuenta lo siguiente. La luna llena es beneficiosa para fomentar la fertilidad del suelo, en luna menguante se suelen trabajar las raíces y trasplantes. En luna nueva hay que intervenir lo menos posible en las plantas y en luna creciente aprovecharemos a trabajar con los tratamientos de mejora de los cultivos.