El presidente de la Asociación Extremeña de Empresas Forestales y de Medio Ambiente (AEEFOR), Francisco Castañares, asegura que "a partir de ahora estamos en una situación en la que puede haber grandes incendios forestales", entre otros factores por el combustible acumulado, el calor y el viento.
Las diez primeras semanas de la época de alto riesgo de incendios en Extremadura dejan un balance de 1.851 hectáreas quemadas, algo más de la mitad de lo que ardió en todo el verano pasado, que se cerró con los mejores datos de la década. Sin embargo, se ha roto la tendencia de dos años consecutivos sin grandes incendios, los que superan las 500 hectáreas. Este año ya se ha registrado uno, en Plasencia, con 564 hectáreas afectadas.