La energía extremeña que alumbra el corazón de Tanzania
Miércoles, 3 Septiembre 2025

Andrea no sabía nada de Tanzania pero hace seis años se marchó allí como mochilera y su corazón se quedó en ese país para siempre. "Terminé en un pueblo muy pequeñito donde conocí a mi hermano tanzano, Paulo y él me presentó su proyecto" Una iniciativa de voluntariado que consistía inicialmente en un precario colegio infantil que entonces englobaba a 35 niños y que logró que "encontrara mi otro lugar en el mundo". Con el tiempo el sueño y el esfuerzo creció y esta joven villafranquesa superando pandemias y distancias, decidió crear una ONG, Kipepeo Tanzania,en la que defiende la vida y la educación local, a día de hoy, de "400 vidas cada una con sus historias". De la escuela se pasó a un internado, la Kilimamoja School, que constituye la esperanza de futuro para las generaciones más jóvenes de la zona.