El grupo de investigación Robolab de la Escuela Politécnica de Cáceres, realiza en coordinación con la Politécnica de Madrid y la Universidad del País Vasco el estudio de investigación “Olas de calor y ciudades: adaptación y resiliencia del entorno construido. El grupo lidera la tarea de diseño y fabricación de un sistema que monitoriza la temperatura y humedad identificando las llamadas islas de calor, los puntos urbanos que almacenan la radiación solar durante el día y la liberan por la noche, aumentando la temperatura del aire con la instalación de 25 sensores de diseño propio y fabricación extremeña en distintos puntos de la ciudad de Cáceres. El objetivo general del proyecto, de 3 años de duración, es adaptar las ciudades al calor detectado los puntos calientes y analizar el nivel de vulnerabilidad del ciudadano ante las altas temperaturas. Depende de factores como la renta, la edad o el tipo de vivienda.. Beatriz Montalbán, una de las investigadoras, nos ofrece más detalles