A falta de datos actualizados sobre la violencia machista en Extremadura correspondientes al año 2021, la consejera de igualdad ha recordado algunos datos sobre esta lacra confirmados durante la pandemia Isabel Gil Rosiña ha destacado que durante los tres meses de encierro ha habido un repunte de los casos, pero que sólo una mujer ha tenido que solicitar el Recurso 'Mascarilla 19' en una farmacia extremeña. Ha recordado también Rosiña que en la región hay 1.696 casos abiertos sobre violencia de género y 637 mujeres están protegidas.
Además, el 30% de las denuncias que se realizan están hechas por el entorno cercano de la víctima. Pero sin duda, el peor dato es que 12 mujeres han sido asesinadas en Extremadura por la violencia machista desde 2003. Y a nivel nacional, ese número se eleva hasta las 1.118 mujeres, a día de hoy. Además, sólo en el 2021, ya han sido asesinadas 37 mujeres por sus parejas o ex-parejas...
De hecho, la última víctima se ha confirmado en San Roque, en Cádiz. Se llamaba Isabel tenía, 37 y dos hijas y un hijo menores de edad. No existían denuncias previas por violencia de género por parte de la víctima contra su agresor. Según datos oficiales del Ministerio de Igualdad, a fecha 8 de noviembre, existen tres posibles casos de violencia contra las mujeres que están en investigación.
Desde 2013 que se cuantifica el número de menores huérfanos, son ya 24 niños y niñas quienes han perdido a sus madres. Y atención, porque desde el año 2013 se han registrado 41 asesinatos de niños y niñas por parte de sus padres. La llamada violencia vicaria. Desde ese año, la cifra más alta se registra en el año 2017 con ocho menores asesinados, pero en el año 2013 fueron seis o en el año 2018 fueron siete.
Por cierto, la Junta de Extremadura ya ha puesto en marcha una nueva campaña contra la violencia machista para conmemorar el 25-N, el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres. La consejera de Igualdad y portavoz ha anunciado también la partida económica prevista para esta campaña especial: más 200 mil euros para combatir esta lacra.
Y es que, la violencia machista entre la gente más joven sigue en aumento. Es sutil. Suele empezar con el acceso forzado a las redes sociales de la chica y continúa con el control del teléfono móvil u otros dispositivos electrónicos. La violencia machista no es un cuento y hay que combatirla con fuerza, desde la adolescencia. Para ello se pondrán en marcha diferentes actividades de concienciación y sensibilización.
No podemos olvidar que la violencia machista es un fenómeno universal e histórico que afecta a las mujeres y niñas de todas las clases sociales, religiones y nacionalidad. Es una clara manifestación de desigualdad entre mujeres y hombres: para prevenirla y combatirla la clave está en la educación en igualdad desde la niñez.