El Ayuntamiento de Almendralejo ha puesto en marcha una iniciativa para recuperar los nombres históricos de las calles de la ciudad, combinando la preservación de la memoria urbana con la renovación de los rótulos deteriorados.
La primera ha sido la calle Donoso Cortés, anteriormente conocida como El Rano. Se prevé que alrededor de 30 calles recuperen sus denominaciones históricas, entre ellas: Calle El Molino (hoy Calle Bailén); Callejita de la Cárcel; Calle Estación; El Espolón; Calle de los Antrines (antes Avenida de América) o Las Casas de Medel (antes Calle Argentina)
Esta acción surge a propuesta del vecino Lorenzo Arnao y con la colaboración de Manuel Rodrigo Asensio, autor de un libro que recopila los nombres antiguos de las calles de la ciudad. La iniciativa no solo busca conservar la memoria colectiva y la historia local, sino también fortalecer el sentido de pertenencia de los vecinos. Los rótulos antiguos recuerdan lugares y espacios familiares para generaciones pasadas, conectando la identidad contemporánea de Almendralejo con sus raíces históricas.
Además de recuperar los nombres, la campaña servirá para reemplazar rótulos en mal estado y completar aquellos que no existían previamente, como es el caso de la Calle Huerto. Este proyecto convierte la ciudad en un museo vivo donde cada calle cuenta una historia y mantiene vivos los recuerdos que han formado su historia.