Aficionados abandonando el Príncipe Felipe después del partido.
El Cacereño sigue sin encontrar la fórmula para ganar en casa. El equipo verdiblanco cayó con contundencia, 0-4, frente al Avilés en un partido que deja tocado al conjunto cacereño y lo devuelve a los puestos de descenso. La afición, resignada, comenzó a abandonar las gradas del Príncipe Felipe tras el cuarto tanto visitante.
El encuentro comenzó con buenas sensaciones para los extremeños, que buscaban por fin marcar y sumar una victoria ante su público. Pero la eficacia del Avilés fue demoledora: Bautista abrió el marcador en el minuto 26 y, poco después, Raúl Rubio hizo el segundo de cabeza aprovechando un error defensivo. La situación se complicó justo antes del descanso, con la expulsión de Iván Martínez por doble amarilla.
Con un jugador menos, el Cacereño no pudo reaccionar en la segunda mitad. Isi Ros amplió la ventaja asturiana en el minuto 70, y Quicala sentenció el duelo con el cuarto tanto en el 84. La derrota deja al Cacereño de nuevo en una posición delicada, con la urgencia de revertir su dinámica y hacer del Príncipe Felipe un fortín que, por ahora, se le resiste.
