Desde la Unión de Consumidores de Extremadura, advierten que las "ofertas de última hora" pueden esconder una estafa online. En España no dejan de crecer, hasta suponer alrededor del 90% de toda la ciberdelincuencia. En verano, hay un ámbito concreto en el que los delincuentes buscan a sus víctimas: el alquiler vacacional.
Según datos de la Policía Nacional, estas estafas vacacionales han crecido un 508% en los últimos nueve años, hasta alcanzar cientos de miles de casos. En concreto, en verano, las denuncias por alquileres fantasma se disparan hasta un 40%.
La mecánica es muy sencilla: los estafadores publican anuncios de viviendas inexistentes o clonadas de otros anuncios reales, en páginas conocidas cuyos sistemas antifraudes son todavía débiles, a precios muy por debajo del mercado y con mensajes apremiantes como “oferta de última hora”, “decídete rápido, que me lo quitan de las manos” y otros parecidos que nos llevan a tomar la decisión de alquilar de forma impulsiva y poco reflexiva. Al fin y al cabo, ¿quién no quiere aprovechar esa oferta irresistible?
A pesar de que el anuncio parece real, el único objetivo de quien lo publica es recibir documentación personal -como el DNI- y pagos por adelantado —generalmente a través de transferencias bancarias o Bizum— antes de que las víctimas se percaten del engaño.
Para evitar caer en la trampa, se recomienda:
- Reservar únicamente a través de plataformas oficiales con políticas claras y atención al cliente. Desconfiar de enlaces remitidos por redes sociales o correo electrónico.
- No pagues fuera de las plataformas oficiales, aunque te aseguren un descuento si lo haces, porque muchas de ellas bloquean el pago hasta que verifican que has llegado al destino y está todo correcto.
- No sucumbir a ofertas excesivamente económicas: precios demasiado bajos son una señal de alerta.
- Evitar las transferencias bancarias o Bizum como forma de pago: son métodos irreversibles que los delincuentes prefieren para desaparecer tras recibir el dinero.
- Verificar que la vivienda existe: solicitar videollamadas, revisar identidad y actividad del anunciante, comprobar valoraciones previas y realizar búsquedas inversas de imágenes. También podemos hacer una búsqueda inversa de imágenes en Google para ver si la foto del piso aparece en otros anuncios con distintos precios o contactos.
- Guardar todas las pruebas en caso de sospecha: capturas, conversaciones, recibos bancarios y datos del anuncio, con el fin de agilizar la denuncia ante la Policía.
- Comprobar la ubicación del piso en Maps.
- Solicitar el número de registro turístico.
- Y, sobre todo, nunca compartir documentación sensible por WhatsApp o correo electrónico.
