En la comarca de Trasierra-Tierras de Granadilla, dentro del municipio de Zarza de Granadilla (Cáceres), se encuentra Granadilla, un pueblo que parece detenido en el tiempo. Fundado por los musulmanes en el siglo IX y originariamente llamado Granada, Granadilla conserva el encanto de la historia medieval española.
Declarado Conjunto Histórico-Artístico en 1980, el pueblo mantiene su trazado amurallado, calles empedradas y edificios que narran la vida de generaciones pasadas, como la iglesia de San Nicolás y casas tradicionales de piedra y madera.
Aunque fue expropiado en los años 60 para la construcción del embalse de Gabriel y Galán y quedó deshabitado, Granadilla sigue vivo a través de programas de recuperación de pueblos abandonados. Hoy acoge actividades culturales, talleres de arqueología y visitas guiadas que permiten revivir su historia.
Granadilla no es solo un pueblo deshabitado: es un viaje al pasado, un lugar donde la historia y la naturaleza se entrelazan, intacto al paso del tiempo y listo para ser descubierto.