Entramos de lleno en una de las etapas que van a marcar el futuro del país. Con el fin de la dictadura de Primo de Rivera y con el rey Alfonso XIII en el exilio, se convocan elecciones que conducen a la proclamación de la Segunda República. Esta época, de grandes anhelos para las clases más desfavorecidas y de incertidumbre para burguesía y nobleza, en Extremadura se suceden acontecimientos de gran magnitud.
El Gobierno republicano acomete la reforma agraria, que jornaleros estaban esperando desde hacía décadas, y los yunteros extremeños acceden a las tierras de labranza. Además, se potencia el acceso a la sanidad y a la educación pública, ya que de cuatro institutos en la región se pasa a nueve en estas fechas.
También se vive el momento de las excavaciones del Teatro Romano de Mérida y las reresentación de la obra Medea en su primer Festival de Teatro Clásico. Y a pesar de los esfuerzos del Real Patronato de las Hurdes, el cineasta Luis Buñuel visita Las Hurdes para filmar su película Tierra sin pan y denunciar la situación de pobreza de la zona.