La historia de Juan Manuel Mancha es la de una persona que no se conformó con el diagnóstico clínico que le dieron los médicos tras sufrir un accidente laboral y que le obligaba a ser usuario de silla de ruedas el resto de su vida.
Tras muchas horas de investigación y consultar a otros especialistas, este joven guareñés encontró un avanzado método terapéutico de neurorrehabilitación que le permitió recuperar gran parte de su movilidad. Con muchísimo trabajo físico y el acompañamiento de grandes profesionales sanitarios está dando pasos agigantados en su curioso proceso de rehabilitación.