La caza del corzo está permitida en la primavera y verano, cuando la mayoría de las especies están cerradas sus vedas. Es cuando los cazadores tienen más horas del día para cazar, pero aún así la caza del corzo a rececho es una actividad cinegética inusual, porque la temporada es corta y se practica de manera esporádica. No es fácil de realizar con éxito, se ejercita en horas inoportunas y en lugares salvajes. Su caza es única, el que prueba la aventura corcera se engancha, por ser un animal salvaje que vive en diferentes territorios, adaptándose y encubriéndose en los hábitats donde come y duerme. Es un animal territorial, sigiloso y solitario, difícil de dar con él, por lo que su caza es exigente y emocionante a la vez. Al corzo se le denomina “el duende del bosque”.
La inusual caza de una especie única
Domingo, 22 Septiembre 2024