Los recorridos de caza son una modalidad deportiva que persigue el fin de simular, dentro de lo posible la caza, pero con platos. Se basa en el tiro deportivo con escopeta, desde un puesto fijo por parte del participante a una serie de platos de diferentes tamaños, que salen despedidos desde maquinas con diferentes trayectorias que simulan los vuelos y andares de las piezas de caza menor.
Las dimensiones totales del campo, incluyendo las necesarias zonas de seguridad, se estiman en tres hectáreas para cada recorrido en terreno llano, mientras en terreno quebrado se puede reducir esta cifra.
Un campo de recorridos de caza, es aconsejable que se encuentre en una llanura pero con colinas, barrancos y desniveles. Además, es imprescindible la presencia de vegetación, con ella se oculta de forma parcial un tramo de la trayectoria del plato. Al disponer de desniveles en los campo hace que los disparos amortigüen el ruido, para los puestos próximos y además nos servirá para disponer de lugares sombreados tan necesarios en la época estival.