San Huberto, la excelencia de la caza.

La modalidad de San Huberto se practica con caza sembrada y se valoran diferentes aspectos:

La conducta del cazador en relación a la pieza de caza y a su perro, y la forma de desenvolverse ambos en el campo. El cazador tiene que tener seguridad en el terreno y habilidad en el tiro, el perro debe poseer cualidades naturales como el olfato, instinto de caza y obediencia a su guía. Por ello, San Huberto es diferente a cualquier tipo de modalidad de caza o competición. Se intenta conseguir la calidad y no la cantidad. Se busca la excelencia de la caza.