Muchos conocerán a Fernando Bárcena porque era el cocinero y propietario de uno de los restaurantes de la región que ha tenido estrellas Michelín, el Aldebarán, en Badajoz. Un día, decidió poner fin a esta etapa profesional y se fue a San Sebastián para dar clases en uno de los centros punteros de la gastronomía mundial, el Basque Culinary Center. Hoy hemos charlado con él un ratito antes de entrar en clase, un trabajo que dice disfruta mucho y del que destaca el contacto con los estudiantes. Durante la conversación nos ha confesado que dentro de nada, cuando se jubile, volverá a Extremadura y que sigue yendo a pescar todas las semanas, como hacía cuando vivía en la región. Respecto a cómo ha cambiado la vida de los cocineros en las últimas décadas es claro: "Todo ha cambiado mucho, la adaptación es constante y en algunas cosas es normal. No puedes estar toda la vida metiendo 12 horas en la cocina"