Mamadou tiene trabajo indefinido, solvencia económica y procedencia senegalesa.
Nuestra compañera Ana gana menos dinero pero es española.
Llaman juntos a los mismos teléfonos para postularse como inquilinos de viviendas de alquiler en Extremadura.
"Ya está alquilado", le dicen a Mamadou.
"Pasa a verlo cuando quieras", le dicen a Ana.
Abordamos la discriminación que sufren las personas extranjeras para alquilar viviendas en Extremadura. La Asociación de Agencias Inmobiliarias de Extremadura nos traslada que no tienen constancia de que esté sucediendo. Sin embargo, los datos de Provivienda y las experiencias que comparten personas afectadas insisten en lo contrario.
Es el caso de Oui, que lleva más de la mitad de su vida en Extremadura (ella y su familia proceden de Marruecos). Oui nos habla de una auténtica tortura en su búsqueda de vivienda. Narra como las inmobiliarias le pedían clausulas abusivas y requisitos que superaban con creces los económicos, y de como, cuando le ofrecían algún piso de alquiler, eran prácticamente infraviviendas en barrios muy concretos, distintos a los que ellas buscaban. Un asunto que conecta de lleno con "la creación de güetos" y la influencia que tiene en el posterior acceso a empleo, educación o bienestar general
Este verano Oui y su familia han acabado agotados tras sufrir un buen número de discriminaciones inmobiliarias. Y ahora deben enfrentar el siguiente trance: "Demostrar en su vecindad que son gente de bien".
No ha denunciado. Solo un 5%lo hace. Con Virginia Galvez de Provivienda, encontramos algunas vías para facilitar la denuncia ante este tipo de situaciones y profundizamos en las raíces de los bulos e informaciones sesgadas que siembran este prejuicio entre la ciudadanía propietaria de viviendas.
