Que Wajdi Mouawad escribe como Dios escribiría de hacer teatro ya lo sabemos. Además, construye tragedias al más puro estilo grecolatino: no hay redención posible, ni final feliz posible, ocurra lo que ocurra uno está vendido, etc. La dirige Sergio Peris-Mencheta. Habla de terrorismo. Entre otras cosas. Uno de sus intérpretes es Pedro Rubio. Se representa este 15 de marzo en el teatro Alkázar de Plasencia.