Hoy nos invita a desayunar Mabel Sánchez y su propuesta tiene nombre italiano, pero pura tradición cacereña. Se sirve en la pastelería-heladería "Monte Bianco" de Cáceres "en la calle San Pedro, a las puertas de la Ciudad Monumental". Lleva en marcha desde 1982 y la tradición familiar iniciada por Juan y Milagros (María) la han heredado sus hijas Yolanda y Guadalupe de cara al público y su hermano Juan Antonio (Maqui) en el obrador.
Bombas de crema, de nata, palmeras... y los tradicionales "trabucos". Una delicia enroscada cubierta de coco que es toda una institución de la capital cacereña. Como lo son sus helados sobre todo en la época veraniega. Y por si fuera poco, si vas con prisa y solo pides un café o zumo, siempre natural, te lo enriquecen con un minicruasán, un bizcochito o unas galletas. Toda la energía del desayuno para disfrutar a tope de una gastronomía a la altura del Patrimonio de la Humanidad.