El gran maestro internacional de ajedrez Manuel Pérez Candelario ve con buenos ojos la propuesta del número 1 del mundo, Magnus Carlsen, de potenciar el ajedrez 960, esto es, que las posiciones de las piezas se sorteen antes de cada partida. Así, las torres podrían empezar donde se colocan los caballos y los alfiles en una esquina. Una cosa loca. Esto que dice Carlsen ya lo decía Bobby Fisher, pero ahora está tomando más fuerza debido a que cada vez hay más partidas que acaban en tablas, en parte por la ayuda del trabajo previo que hacen los jugadores y los programas informáticos con los que cuentan. Estas partidas, según Pérez Candelario, "serían más divertidas y fomentaría la creatividad" pero no cree que acaben con el ajedrez tal y como lo conocemos. Lo que no ve es otra propuesta de la que se habla mucho también sobre la eliminación del enroque. El gran maestro extremeño piensa que "eliminarlo sería como si en la Edad Media hubieran tenido que ir a la guerra y no tuvieran castillos".