Habrá 30 millones de euros para las explotaciones afectadas por la Lengua Azul y para los cereceros del Jerte, será posible gracias a la luz verde que ha dado este martes la Eurocámara para que se incluyan como ayudas frente al cambio climático
644 votos a favor, seis en contra y tres abstenciones
Por 644 votos a favor, seis en contra y tres abstenciones ha salido adelante la reforma del decreto que permite que cada país destine el 10% de los fondos FEADER no gastados en 2021 y 2022 a paliar los daños causados por catástrofes naturales. Una apuesta por la simplificación para que los Estados miembros, puedan declarar un área entera afectada, permitiendo así, ayudas que aportarán liquidez a los agricultores y pequeñas y medianas empresas.
Cada beneficiario percibirá como máximo 42.000 euros
En el caso de Extremadura, afectaría a las pérdidas ocasionadas por la lengua azul y a las provocadas por las tormentas en el cultivo de la cereza. Se destinarán en total 30 millones de euros y cada beneficiario percibirá un máximo de 42.000.
Buena acogida por parte de productores
La noticia ha sido bien recibida, así lo ha manifestado Ángel Pacheco, Presidente de Cooperativas Agroalimentarias de Extremadura; "estábamos todos totalmente de acuerdo, que cuando hay temas excepcionales como puede haber sido este año la Lengua Azul, eso ha tenido una incidencia muy negativa tanto en muertes como en pérdidas de producción".
Por su parte, los cereceros Ramiro Muñoz y Pedro Calle, sostienen que, "llevamos dos campañas muy malas, por tanto yo creo que la cereza necesita un reconocimiento y ayudas", ambos reiteran además, que se agilicen los pagos, "nos dicen que vienen dinero, pero a nosotros al final, no nos llega".
Pues para que llegue, tras el visto bueno de Europa, ahora es la Junta la que tiene que modificar el Plan de Desarrollo Rural extremeño para que estos sectores cobren las ayudas.