Los alojamientos rurales y los hoteles extremeños han estrenado este primer fin de semana sin restricciones a la movilidad a medio gas. No han recibido el "boom" de turistas que esperaban. Aún así empiezan a recuperar el ánimo y lo consideran la llave de la nueva temporada.
En el norte de Extremadura la ocupación es del 50% y del 30% en el resto de la región, informan desde el sector turístico regional.
Este primer fin de semana sin Estado de Alarma no ha sido tan espectacular como creían, pero lo dan por bueno porque representa el principio del fin de meses sin apenas clientes. Un comienzo tímido para Victoria Bazaga, presidenta de FEXTUR, la Federación Extremeña de Turismo Rural, que esperan ir mejorando.
En el caso de los hoteles la situación es parecida. No ha habido un "boom" de turistas pero ha servido para que los que habían echado el cierre comienzan a abrir. Manuel Mª Moreno, presidente de CETEX, la Confederación de Hoteleros de la región.
Reservas para julio y agosto
Esther y Luis son turistas que han decidido visitar Extremadura. Visitan Casares de las Hurdes. Ella es de Madrid; asegura que cuando cruzó el límite provincial con Castilla La Mancha se sintió emocionada. Luis llega desde Ávila; es la primera vez que visita la región y está encantado con lo que está viendo.
Ascensión Rodríguez, de la casa rural Aldea Las Cabechuelas nos avanza que ya empieza a tener reservas para julio y agosto, por lo que el verano promete ser bueno si no hay más sobresaltos por la pandemia.
Tanto hoteles como establecimientos rurales se muestran confiados de cara a la temporada veraniega siempre que avance la vacunación. No obstante, constatan que la pandemia ha cambiado los hábitos de los visitantes, que ya no planifican sus estancia con tiempo y apuestan por las reservas de última hora.
