Cuando a Sergio Gamberini en 2012 se le ocurrió plantar albahaca bajo el agua le tomaron por loco. Hoy el cultivo bajo el agua acapara las miradas y el interés de todo el mundo, en España ya es una realidad y empresas extremeñas ya han apostado por este sistema de cultivos. Cada vez hay menos terreno y en peores condiciones, por este motivo se ideó este sistema de cúpulas sumergibles. A día de hoy ya se ha experimentado con 20 tipos de cultivos. Aromáticas, tomates, fresas y los resultados han sido muy positivos.
Al fin y al cabo es crear hábitats que ofrecen una estabilidad en las condiciones constantes de temperatura en las plantas muy beneficiosas para su desarrollo.
En Extremadura las bodegas Habla han comenzado a apostar por el envejecimiento de los vinos bajo el agua. Primero se envejecen en tinajas en bodega y posteriormente los trasladan al Golfo de Vizcaya. Vinos que ofrecen un sabor diferente al envejecido en tierra.