Cuenta atrás en marcha: Gobierno y agentes sociales tienen 30 días para cerrar la reforma de las pensiones. El aumento del tiempo de cómputo desde los 25 años actuales a 30, eligiendo los 28 mejores, que propone el ministro Escribá, divide al Gobierno. La vicepresidenta primera la defiende, pero la vicepresidenta segunda no.
Nadia Calviño cree que va reforzar la sostenibilidad a largo plazo del sistema de pensiones. Sin embargo, Yolanda Díaz replica que "es un endurecimiento en el acceso a la jubilación que no podemos compartir, lo hemos dicho en multitud de ocasiones".
Mientras, el Partido Popular insta a Escribá a convocar una comisión del Pacto de Toledo para debatir la propuesta con seriedad y rigor. Y la patronal ya avanza que ve difícil llegar a un acuerdo.
También los sindicatos rechazan el sistema de cálculo. Pepe Álvarez señala que "se ha vuelto a equivocar. Que se deje de enredar y entremos a discutir en una mesa".
El presidente extremeño se remite al Pacto de Toledo: "Eso tiene que ser obviamente la consecuencia de una reflexión en el Pacto de Toledo. Solo de ahí puede salir una refllexión clara".
La propuesta de Escribá contempla además mejoras para las lagunas por cotización tras tener un hijo, para los autónomos o el complemento por brecha de género. También subir las bases máximas de cotización un 30% adicional a la inflación.
El periodo de cálculo para la pensión ya subió en 2011 desde los 15 años a los 25 actuales.
