El año pasado, los fieles al gallinero del Teatro Romano de Mérida (muchos de ellos con abono desde niños) ya se encontraron con una sorpresa: piedra recubierta de fibra para mayor comodidad y mayor protección del patrimonio.
Pero en esta edición del Festival Internacional de Teatro Clásico de Mérida, además de que ya toda esa grada está cubierta, hay más: cojines en toda esa cávea, igual que en el resto de localidades del teatro.
A partir de ahora, quienes opten por el gallinero, no solo tendrán una de las mejores vistas del monumento, sino que también podrán elegir una de las 410 almohadillas que habrá a su disposición. Pero están sin numerar. Eso quiere decir que, de momento, para coger los sitios más codiciados (los centrales) hay que seguir haciendo cola.
El gallinero del Teatro Romano cuenta 410 cojines