Al menos siete personas han muerto en la última década ahogadas en los azudes del Guadiana a su paso por Badajoz. Cinco de ellas en el azud de La pesquera, donde el miércoles desapareció un menor de 13 años y ayer encontraron un cuerpo, aún sin identificar oficialmente, aunque todo parece indicar que se trata del mismo chico.
En la zona hay un cartel de la Confederación Hidrográfica del Guadiana que advierte de que está prohibido acceder a la estructura del azud. Por el peligro del desnivel de 3 metros que hay hasta el agua, pero también por las pozas y los remolinos que se forman.
"Aguas abajo de los azudes hay zona de rocas, con lo que ya es peligrosa de por sí la caída, pero es que aunque el caudal del río sea bajo es peligroso porque el efecto rebufo lo hace igual en poco caudal", nos cuenta Nicolás Cifuentes, comisario de aguas de la Confederación Hidrográfica del Guadiana.
Los técnicos de la CHG, dice Cifuentes, echan a los bañistas cuando los ven, pero no pueden estar permanentemente vigilando. Los pescadores de la zona también ven el trasiego de paseantes y advierten del peligro, no solo por las pozas, sino porque el fondo del río está lleno de restos que pueden atrapar a los bañistas.
"Ahí dentro hay barras de hormigón, hierros que vemos cuando baja el río, hasta un coche denunciamos que hay dentro y vinieron a verlo y ahí sigue", denuncia Paco Ortiz, un pescador de la zona.
Los pescadores piden que se valle el acceso con una alambrada y un candado a la pared del azud que lleva a la mitad del río, como también lo pedía ayer la familia del menor ahogado. "Se podrían poner vallas, señalizarlo, ¿cuántas tragedias más tiene que haber para que los organismos competentes tomen cartas en el asunto? , se preguntaba ayer Ramón Saavedra, tío del menor fallecido.
Pero la Delegación del Gobierno en Extremadura, de momento, no se lo plantea a corto plazo. "Se está haciendo ahora mismo una obra en la zona y se plantea tomar algunas medidas, pero es que hay que recordar que está prohibido bañarse, porque es peligroso, el río está vivo", asegura José Luis Quintana, delegado del gobierno en Extremadura.
Y es que siempre hay que desconfiar de unas aguas aparentemente mansas... que pueden acabar en tragedia.
Encuentran un cuerpo en el tramo del Guadiana donde buscaban al chico desaparecido en Badajoz