La Junta de Extremadura está ultimando los trabajos de limpieza y desbroce de vegetación en caminos de la Sierra de la Mosca de Cáceres para prevenir los incendios forestales en este paraje de cara a la temporada de riesgo alto de fuegos. De momento, están ejecutadas un 50% de las obras y de aquí al mes de junio concluirán los trabajos que facilitará la entrada y salida de vehículos de emergencias en caso de tener que intervenir.
Las actuaciones, que cuentan con una inversión de más de 635.000 euros y están cofinanciados por el Fondo Agrícola de Desarrollo Rural, van a mejorar la seguridad de la ciudadanía, la eficiencia en los servicios de extinción, así como contribuir a preservar una zona de alto valor paisajístico, muy próxima a la ciudad.
En este mismo sentido, se beneficiarán directamente más de 600 propietarios de parcelas y viviendas ubicadas en la superficie, ya que la nueva normativa aprobada en 2017 permite a la administración actuar en terrenos privados para mejorar la prevención de incendios.
Los trabajos que se están realizando son actuaciones silvícolas y creación de infraestructuras. En la zona se han limpiado restos agrícolas que invaden caminos y áreas de olivares abandonados, se están creando franjas de 8 metros como perímetro despejado de los viales.
La consejera de Agricultura, Desarrollo Rural, Población y Territorio, Begoña García, ha visitado este martes estos trabajos forestales junto al director general de Política Forestal, Pedro Muñoz, y el alcalde de Cáceres, Luis Salaya.
Esta planificación de la Dirección General de Política Forestal cuenta con la consideración de interés general en la ejecución de actuaciones e infraestructuras preventivas que se han encargado a Tragsa y aparece regulada en el Decreto 112/2022, de 31 de agosto.
Otras actuaciones
Entre otras actuaciones, destaca la recuperación de los accesos a caminos y pistas, la construcción de dos depósitos de agua y un puente para sortear el arroyo de Valhondo, como contempla el plan de actuaciones para la creación de la red preventiva frente a los incendios que tiene como objetivo "dar más seguridad a la gente", ha dicho la consejera.
En concreto, se han concluido las fajas auxiliares asociadas a la red de accesos y veredas para asegurar el tránsito de vehículos y personal de extinción, se han abierto 2,5 kilómetros de camino, tramos de enlace a caminos sin salidas. Próximamente, se procederá a establecer los dos puntos de agua con capacidad de 126.000 litros por depósito, se acometerán volvederos, se ensancharán cruces y se levantará el puente referido.
Entre otros espacios se ha actuado en la zona conocida como el Aulladero de los Lobos al camino de Sierra de Fuentes, Valdeflores de Arriba, Casa del Portanchito, Hormiga a Cerro Milano y Valhondo.
En esta línea el alcalde de Cáceres, Luis Salaya, ha destacado la importancia de estos trabajos preventivos que está llevando a cabo la Junta de Extremadura en esta zona en la que, según ha dicho, cuando llegó al Gobierno local hace cuatro años estaba "en un descuido total, lo que suponía un riesgo inmenso de incendios".
Salaya trasladó esa situación a la consejera y ella además de ratificar el riesgo que suponía la zona, "insistía en que había que priorizar el tener vías claras para la salida de los vecinos en caso de incendio y vías que permitieran la entrada de vehículos de extinción para dar seguridad a la zona", ha explicado.
El regidor municipal ha indicado que el hecho de que se haya intervenido en propiedades de más de 600 particulares diferentes, implica por un lado la proactividad de la administración que quiere intervenir y ayudar en base a la normativa que se aprobó en 2017, pero también deja a la luz "una realidad como es el descuido de estas fincas por parte de muchos propietarios".
Por ello, ha hecho un llamamiento a los propietarios para que mantengan las fincas, "que intervengan ahora que todavía pueden de cara a la campaña de incendios, y que estas actuaciones no les generen una falsa sensación de seguridad, estas actuaciones sirven para poder actuar si hay incendios, pero lo que necesitamos es que los particulares actúen ya en sus fincas precisamente para evitarlos, con limpieza y mantenimiento".
Cabe recordar que esta zona de la Montaña cacereña eran hace años explotaciones tradicionales y familiares, y se han convertido en segundas residencias y residencias de verano, "pero ello implica una serie de responsabilidades y tener que mantener las fincas, y es lo que pedimos a los particulares", ha aseverado Salaya.