El Ayuntamiento de Cáceres ha ordenado a los hosteleros recoger las terrazas de la vía pública una hora antes del paso de las procesiones de Semana Santa, y no media hora antes como se acordó flexibilizar en 2019, en la anterior legislatura de la popular Elena Nevado.
Es la primera vez que el alcalde de Cáceres, Luis Salaya, tiene que lidiar con la gestión de la Semana Santa cacereña (de Interés Turístico Internacional), dado que este festejo multitudinario no se celebró en 2020 ni 2021 por la pandemia de la covid.
En 2019, los hosteleros tuvieron la oportunidad de levantar los veladores solo mientras pasara el desfile por sus establecimientos, por primera vez.
"Los hosteleros siempre quieren desmontar más al límite, pero no vamos a arriesgarnos a que durante el paso de una procesión estemos escuchando el ruido del desmontaje", ha aseverado el alcalde tras la celebración de la Junta Local de Seguridad en el Ayuntamiento de Cáceres.
Según Salaya, se va a "mantener" el protocolo de hace dos años, con "algunas mejoras". "Para que las terrazas se desmonten una hora antes del paso de la procesión; se avisa dos horas antes de que tienen una hora para desmontar, y se vuelve a comprobar que se han desmontado durante el paso de la procesión", ha explicado.
Sin embargo, el portavoz del Grupo Popular, Rafael Mateos, que fue edil de Seguridad con Nevado, ha asegurado que es "un error generalizar, porque la casuística es muy amplia", y hay terrazas, en según qué espacios, que "es innecesario que desmonten una hora antes".
"Hay que ajustarlo a criterios de seguridad, experiencia y sentido común, para que afecte los menos posible a la explotación comercial de un negocio", ha señalado Mateos en declaraciones a Efe.
No obstante, Salaya ha insistido en la coordinación: "creemos que va a salir todo muy bien porque se está dando ya la información; los hosteleros recibirán visitas de la Policía Local para informarles, y pasarán dos horas antes para recordarles que tienen una hora para desmontar
