La Fundación Lumbini Garden, que promueve la construcción de un complejo budista en Cáceres, va a presentar en las próximas semanas en el ayuntamiento el proyecto básico de ejecución del proyecto, que es el paso previo para poder conceder la licencia de obra y comenzar la construcción en 2025, que es la fecha prevista por los promotores del Gran Buda cacereño para la instalación de la gran estatua de Buda.
Representantes de la fundación visitaron la semana pasada la ciudad para seguir avanzando en este proyecto que "está en buen camino", ha dicho este lunes el alcalde de Cáceres, Rafael Mateos, que ha recordado que ya hay acuerdos cerrados con los propietarios de los terrenos donde se instalará el complejo budista, cuyo proyecto está evaluándose desde el punto de vista medioambiental y ya ha tenido pronunciamientos previos que le dan el visto bueno.
Mateos ha recordado que el Gobierno local ha trabajado desde el primer momento en este proyecto que estaba previsto construirse en el cerro Arropez, en unos terrenos municipales que cuentan con restricciones medioambientales por ser zona de especial protección de aves (ZEPA), por lo que se decidió cambiar la ubicación a la zona de Cerro Romanos, en terrenos privados.
"Nosotros trabajamos desde el primer día que llegamos al gobierno de Cáceres por desencallar un proyecto que se había vendido antes de tiempo y, sobre todo, que se había mandado a una ubicación que era imposible que acogiese ese proyecto", ha recalcado Mateos en una entrevista concedida a la cadena SER y recogida por Europa Press.
Mateos ha insistido en que en "sólo seis meses" su gobierno le dio certezas al proyecto al buscarles una nueva ubicación y facilitarles los trámites y, un año después, "podemos decir que es un proyecto que está en marcha y que posiblemente sea realidad en la ciudad de Cáceres".
Lo primero que se construirá será la gran estatua de Buda de más de 45 metros para lo que solo hace falta ya la presentación del proyecto básico que incluirá el informe paisajístico para que el ayuntamiento pueda conceder la licencia de obra y empezar a construir esa estatua, que será el punto de arranque del complejo budista.
Después habrá que elaborar un plan especial en una segunda fase para reestructurar todos los espacios de forma urbanística, pero esto no afecta a la construcción de manera directa de la gran estatua de Buda, que podrá empezar a ejecutarse. "Es proyecto que lleva más de seis años encima de la mesa, que ha estado los cuatro años de gobierno socialista totalmente parado y necesita algún avance, necesita algo material y por eso con el proyecto básico se podrá dar la primera licencia", ha resaltado.