La fusión de Don Benito y Villanueva de la Serena obligará al nuevo ayuntamiento a crear una zona de bajas emisiones. Ese nuevo ayuntamiento dispondrá para ello de un plazo de diez años, que empezará a contar en 2027, cuando la ciudad resultante de la fusión supere los 50.000 habitantes.
A día de hoy, sólo un 2% de los coches de ambas localidades podrían circular libremente y sin restricciones por esas áreas pero, a partir de esa fecha clave, los vehículos más contaminantes, aquellos que no pueden obtener una etiqueta como ésta al estar matriculados antes de 2001, no podrán circular por determinadas partes de la nueva ciudad, normalmente por el centro.
Una medida que, si se hiciese efectiva en la actualidad, ya afectaría al 30% del parque automovilístico de ambas localidades.