No ha habido consenso y al final el Gobierno ha decidido descartar el cementerio nuclear centralizado y que cada planta almacene sus propios residuos. Una decisión implica que se tengan que construir siete Almacenes Temporales (ATIs) en España para guardar el combustible utilizado durante más de cuatro décadas de actividad. Entre ellos, el de Almaraz.
La planta cacereña ya cuenta con una infraestructura propia en la que almacena el combustible que va generando hasta el cese de su actividad, pero para su desmantelamiento necesitaría un almacén mayor.
El portavoz de la central, Aniceto González, ha explicado que por ahora tienen una capacidad de 20 contenedores de los que solo han usado seis. "Sin embargo, en el momento en que se paren los reactores, hay que construir o ampliar la infraestructura para vaciar las dos piscinas y poder almacenar sus residuos".
Almacenes hasta 2073
Serán almacenes temporales, dice el Ministerio de Transición Ecológica, pero se les calcula una larga vida útil porque la solución planteada a largo plazo es un "almacén geológico profundo" que no entraría en funcionamiento hasta, al menos, 2073.
"Esta solución es la más coherente"
Sobre esta nueva postura del Ejecutivo, la Junta de Extremadura reconoce que su primera opción era un cementerio centralizado, pero al no haber consenso, entiende esta solución como la más coherente.
"En ningún caso puede ser la excusa para alargar la vida de las centrales nucleares"
Y desde Ecologista en Acción, su abogado Ángel García Calle, señala que "esta decisión era la menos mala", pero advierte de que "en ningún caso puede ser la excusa para alargar la vida de las centrales nucleares en España".
Mientras, desde el Ayuntamiento almacereño su alcalde, Juan Antonio Díaz, prefiere ser prudente y esperar a conocer las repercusiones que esta propuesta, de salir adelante, puede tener para el pueblo.