Mérida
8 Octubre 2020, 22:09
Actualizado 8 Octubre 2020, 22:09

Los veterinarios también están jugando un papel importante en la lucha contra el COVID- 19. Pero el colectivo considera que debía haberse tenido en cuenta antes su opinión en esta crisis sanitaria. Así lo cree al menos Antonio Morillo. Él es veterinario y vecino de Valdelacalzada, municipio donde, con ayuda de estos profesionales, se tomaron las primeras medidas de prevención.

Cuando en esa localidad pacense surgieron en marzo, antes del Estado de Alarma, dos casos de COVID-19, con el asesoramiento de los veterinarios cerraron el centro de día para proteger a los mayores y se creó un protocolo de desinfección de calles y mobiliario urbano con la colaboración de los agricultores. 

"Somos indispensables en la labor de rastreo"

Están cumpliendo además funciones de rastreadores para controlar los contactos estrechos de los positivos que se notifican. Muchos de ellos son veterinarios de Salud Pública, especialistas en rastreo de otras enfermedades. También en el ámbito de la sanidad animal hay especialistas en encuestas epidemiológicas a la hora de rastrear los posibles focos de contagio de los animales. Por lo que Antonio Morillo sentencia: "somos indispensables en esa labor porque llevamos desarrollándola muchos años en otros ámbitos".

Y advierte de que debido al cambio climático cada vez son más las enfermedades infecciosas que pueden transmitirse de animales a humanos. Además, con la globalización, puede llegar en muy poco tiempo a cualquier parte del mundo. Por eso los veterinarios, como cualquier profesional sanitario, se mantienen en constante formación para adaptarse al avance y cambio de las distintas enfermedades.

Espera Antonio que la experiencia y los protocolos desarrollados para combatir el coronavirus sirvan para luchar contra otras enfermedades y ante otras posibles crisis sanitarias.