El Hospital Universitario de Badajoz contará próximamente con un robot de pruebas masivas de COVID19 con capacidad para procesar 2.400 tests al día. Es la continuación de una iniciativa que ya dotó de esta tecnología a cuatro hospitales de Madrid y Barcelona en el momento de máxima incidencia de la pandemia, en concreto La Paz, el Vall d'Hebron, el Hospital Clinic y el Instituto de Salud Carlos III.
Se trata de un proyecto de cinco profesionales de la sanidad, la investigación y la tecnología, que buscaron la colaboración del Ministerio de Sanidad y también financiación para traer a España una tecnología ya existente en otros países y la encontraron en los directivos y empleados de Merlin Properties. Su consejero delegado, el extremeño Ismael Clemente. explicaba a Canal Extremadura Radio que después de la primera donación de esos 4 robots, muchas otras empresas del Ibex 35 se unieron a la iniciativa y ahora son 12 robots los que se van a donar, uno de ellos al hospital Universitario de Badajoz.
El robot tendrá capacidad para realizar 20 veces más PCR
Los robots de procesamiento de muestras masivas PCR son capaces de realizar hasta 2.400 tests de COVID19 en un día, mientras un laboratorio con mano humana llega solo a los 120. Con la implantación de estos robots se incrementará el número de tests para tener más armas contra la pandemia. Un aparato compuesto de varias urnas de cristal que mecaniza las fases de análisis de las muestras, de forma repetitiva, y que al contar con esa mecanización y no tener que preocuparse por la seguridad, como sí ocurre en el caso de los sanitarios que procesan las pruebas en los laboratorios, incrementa su capacidad de realizar estas pruebas PCR hasta multiplicarlas por 20.
Es, asegura Ismael Clemente, la forma de cumplir las recomendaciones de la OMS y hacer tests masivos para dibujar un mapa de la pandemia y lograr contenerla hasta la llegada de la vacuna. Clemente cree que en los próximos meses o incluso años la población tendrá que someterse a tests periódicos del COVID19 para poder de esa forma seguir controlando la enfermedad sin saturar los sistemas sanitarios.
TEXTO: Virginia Pérez de la Puente
IMAGEN: EFE / Enric Fontcuberta