Las ayudas por la compra de vehículos eléctricos han estado en el punto de mira de los posibles compradores porque, aunque son un aliciente para optar por esa tecnología, generaban dudas por la complejidad burocrática que suponían a veces. Estaban financiadas por el gobierno central a través de los planes Moves, pero la gestión la llevaba cada Comunidad Autónoma. Algo que ha supuesto desigualdades en los plazos.
El ejecutivo central asume directamente la gestión de las ayudas
El nuevo Plan Auto 2030 que ha presentado hoy el ejecutivo elimina esa regionalización para homogeneizar las ayudas y asume directamente la gestión de las ayudas. Se trata de una reivindicación que se venía reclamando desde el sector. "Si las ayudas son más rápidas y más unificadas va a ayudar mucho a la compra de un vehículo eléctrico", asegura José Luis Galán, asesor de ventas del Grupo Gedauto en Mérida.
Ayudas directas
La idea que se ha presentado es que las subvenciones se apliquen directamente en los puntos de venta. Es algo que no ocurre hasta ahora. Se trata de que cuando el cliente llegue al concesionario, éste actúe como intermediario y solicite la ayuda. De esta forma esa subvención se descontaría directamente del precio de compra. "Si el concesionario es el que adelanta el dinero, y sería mucho dinero, al concesionario se le tendría que reponer sin retrasos. Si es así, facilitaría mucho las compras de vehículos eléctricos", aclara Galán.
