María Eugenia Venegas volvía a su casa este sábado tras un duro turno de tarde como enfermera en una planta COVID del Hospital Universitario de Badajoz. Al llegar al portal, vio como al lado de su edificio había un grupo de personas celebrando una fiesta.
"Cuando sales de la planta COVID y ves una fiesta en la calle, te preguntas si merece la pena tu esfuerzo"
"Pensé que para qué sirven las horas echadas en el hospital, si al final vemos esa irresponsabilidad en la población", afirma algo cansada. "No somos conscientes de lo que está pasando".
Tercera ola "horrible"
María Eugenia, que lleva trabajando desde abril en la planta de COVID, sabe bien de lo que habla. "En la primera y la segunda ola fue mejor, pero esta tercera ola está siendo terriblemente mala"- asegura. Esta enfermera afirma que a diario ven cómo se masifican las entradas en urgencias, cómo se llenan las UCIS y como se van sumando espacios para camas porque no llegan.
"Esta tercera ola está siendo terriblemente mala"
"Nosotros sabíamos que tras las fiestas de navidad podía pasar esto, el aumento de contagios era algo previsible, de esta manera tan brutal no lo imaginábamos", asegura la enfermera. "Nos llegan de golpe 15 pacientes y todos necesitan hospitalización, esto no lo habíamos vivido en las anteriores olas", nos cuenta.
Autoconfinamiento, por favor
Por eso las palabras de esta enfermera, que convive a diario con el COVID, son tan importantes. "Lo único que le pedimos a la gente es que se proteja. Que si tienen que salir a trabajar salgan, pero el resto del tiempo se queden en su casa, por su propio bien, es lo único que pedimos los sanitarios".