Delia y José son dos voluntarios de Cruz Roja. Están preparando el dispositivo de mantas, sacos de dormir y abrigos con los que proteger del frío a varias personas sin hogar en Cáceres. Muchas de las personas a las que atienden duermen en cajeros automáticos y otros en plena calle.
La alerta por bajas temperaturas ha hecho que se intensifiquen los recursos para que nadie esté a la intemperie. En Cáceres, la Cruz Roja lleva atendidas 19 personas, 25 en Badajoz, 12 en Mérida y Cáritas en Plasencia ha asistido a 15.
Los principales ayuntamientos extremeños a través de los voluntarios de Cruz Roja, Cáritas y DYA (Detente Y Ayuda) junto a las policías locales y nacionales hacen posible que esta asistencia llegue a los que más los necesitan.