El Ratón Pérez es el protagonista de uno de los proyectos científicos más ambiciosos para conocer nuestro pasado. Y estos niños están ayudando de una forma muy sencilla: entregan su diente de leche cuando se les cae.
Y lo que se descubre... es asombroso.
"Se puede extraer cómo el esmalte ha ido cambiando desde la Prehistoria hasta nuestros días, cómo es el tipo de dentina, incluso vemos que nuestro ADN es igual al de los primeros pobladores de Atapuerca"
Es en el laboratorio del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana donde analizan las piezas y extraen conclusiones. Entre ellas, la diferencia en los dientes según el género o las consecuencias de unos mayores hábitos higiénicos.
"Antes no se lavaban los dientes. Imagino que se limpiaban con hojas de plantas, una de las primeras conclusiones que se extrajo fue que lavarse los dientes hace que se vaya perdiendo el esmalte"
Y los niños, encantados de poner su granito de arena en la ciencia.
"Para ayudar a las personas y a los dentistas"
Desde que se puso en marcha el proyecto se han donado unos cuatro mil dientes de leche, un centenar de ellos desde nuestra región.