La Guardia Civil ha detenido a un vecino de Badajoz cuando transportaba más de un kilo de hachís oculto bajo un asiento del vehículo que conducía a la altura de la localidad pacense de Valverde de Leganés.
La actuación tuvo lugar la noche del pasado miércoles cuando agentes de la Guardia Civil que realizaban un control en la carretera EX310 a su paso por el término municipal pacense de Valverde de Leganés interceptaron un turismo. Durante el transcurso de la identificación de su conductor, un vecino de Badajoz, los agentes detectaron un "comportamiento nervioso y excesivamente esquivo", por lo que sospecharon que pudiera transportar oculto algún efecto ilícito.
Fue en este mismo momento cuando fueron requeridos por la central operativa de servicios para atender una urgencia que comunicaba un ciudadano, ante lo que hicieron gestiones para comprobar que el informante "tenía vinculación directa con el conductor que se acababa de interceptar, también vecino de Badajoz con numerosos antecedentes policiales". Por tanto, la única finalidad en la comunicación urgente "era desviar la atención de los agentes durante la identificación e inspección en dicho punto de control, hacia otro cometido prioritario", según relata la Guardia Civil en nota de prensa.
Una vez inspeccionado el vehículo, los agentes hallaron bajo el asiento del copiloto un paquete que contenía un kilo de hachís distribuido en diez tabletas, así como en la guantera 13.900 euros. Dinero que supuestamente procedía de la venta de sustancias estupefacientes.
Calcula la Guardia Civil que de la droga intervenida podría obtenerse en el mercado ilícito unas 4.000 dosis, y tendría como destino para su distribución y venta el lugar de residencia del ahora detenido.
Ante estos hechos se detuvo al conductor del vehículo por el supuesto delito contra la salud pública al traficar con drogas, y también se investigó al comunicante de la incidencia, además de por su supuesta implicación en la misma acción delictiva, por la simulación de un delito al comunicar unos hechos que resultaron ser falsos, interviniéndoles a ambos sus teléfonos móviles para su posterior análisis y estudio.
Las diligencias han sido puestas a disposición del Juzgado de Instrucción de Olivenza.