Llevamos días con altas temperaturas y el cuerpo lo nota: fatiga, desgana, mal descanso... No se trata solo de una sensación. ¿Estamos más irritables cuando sube el termómetro?
"Te encuentras con el calor muy cansada", asegura una mujer. "Te sientes más irritable porque no duermes bien", dice un hombre.
Tenemos menos paciencia, estamos más impulsivos
No hay que entrar en pánico: en esta época es normal sentirse así, y la ciencia lo confirma. Marga Sánchez Pericuesta, psicóloga, explica: "Tenemos menos paciencia, estamos más impulsivos. Este calor no solo se nota en cómo nos sentimos, sino en cómo actuamos, en nuestra conducta".
Aunque estos días es difícil encontrar gente por la calle, todos coinciden en lo mismo: "Estamos más cansados". "La noche anterior tuve que echarme agua fría".
La falta de descanso es clave, asegura la psicóloga Sánchez Pericuesta: "Al día siguiente nos afecta a la concentración, la atención... tenemos como más neblina mental, y eso hay personas a las que les puede llevar a sentirse agobiadas".
"Me agota mucho"
Por eso también se cuela en la rutina: "Me agota mucho, no tengo ganas de nada". "Da muchísima pereza trabajar con este calor". Y como no podemos evitarlo, hay que aprender a sobrellevarlo. Así que: mucha agua, sombra, siesta y paciencia. No hay otra receta.