El Gobierno remite a las Comunidades su propuesta de cambios de la PAC. Entre lo más destacado, plantea suprimir la obligación de tener que destinar una parte de las explotaciones a superficies no productivas y flexibilizar algunos requisitos para cobrar íntegras las ayudas al campo de Bruselas, que han sacado a la calle a los tractores de agricultores y ganaderos de media Europa.
Cambios bienvenidos pero insuficientes para las organizaciones agrarias. La propuesta de modificación del Plan Estratégico de la PAC servirá de base para negociar esos cambios en la Política Agraria Comunitaria con la Comisión Europea. El documento, según el Gobierno, recoge buena parte de las reivindicaciones de las organizaciones agrarias, pero estas consideran estos cambios insuficientes.
Modificaciones urgentes para el campo que, según el ministerio de Agricultura, podrán tener carácter retroactivo desde el 1 de enero de 2024 y, por tanto, surtirían efecto para la solicitud de ayudas de este mismo año. Eso siempre que el Parlamento Europeo los apruebe antes de un mes, según el dirigente de Asaja Cáceres, Angél García Blanco.
La propuesta que ha trasladado el Ministerio es el documento base de una negociación que tendrá un largo recorrido, porque cualquier cambio en la PAC necesita de la aprobación de la Comisión Europea, y las citadas bendiciones del Parlamento Europeo, así como de los ministros de Agricultura de los 27. Sin embargo, en esta ocasión, los dirigentes agrarios confían en que se den prisa porque hay elecciones europeas a primeros de junio.