En Navidad, las ventas de productos pirotécnicos se duplican. Los ayuntamientos, como el de Badajoz, han recordado que estos artefactos solo pueden adquirirse en establecimientos autorizados y lanzarse en lugares habilitados, según los bandos municipales.
Impacto en las mascotas
El ruido de los cohetes afecta gravemente a los animales. Shamanel, un pastor australiano juguetón e independiente, muestra un comportamiento completamente diferente cuando se activan fuegos artificiales. Jesús González, dueño de Shamanel, explica que situaciones de estrés pueden causar secuelas permanentes en las mascotas, como sordera o ceguera.
María Clemente, directora de la clínica Veterplas, recomienda calmantes específicos para mitigar estos efectos en los animales: "Se ponen a rascar compulsivamente las puertas, se esconden debajo de las camas y no quieren salir... aconsejamos que tiren de estos medicamentos".
Requisitos para la venta y uso
La comercialización de petardos requiere permisos especiales. Su venta está prohibida a menores de 18 años y a personas bajo los efectos del alcohol u otras sustancias. Además, un uso indebido puede conllevar multas de hasta 700 euros, según explica José María Nisa, concejal del Ayuntamiento de Plasencia.
Responsabilidad individual
En estas fechas, se apela a la responsabilidad ciudadana para garantizar que lo único que estalle sean los cohetes, no la convivencia.