El sector arrocero de Extremadura teme la llegada de un nuevo competidor. La retirada de aranceles a Camboya y Myanmar podría suponer un problema muy grave para un sector de vital importancia para la región.
Así lo considera Herminio Íñiguez, agricultor. Él considera que esta medida "perjudica muchísimo" a su sector. Un perjuicio, asegura, porque desde aquí no pueden competir con los costes de producción de estos países. Tampoco con los requisitos de trazabilidad del producto recolectado allí. "Es arroz mucho más barato y con calidades inferiores, pero lo que prima es el precio", nos cuenta.
Organizaciones y agricultores piden a la Unión Europea que defienda los productos nacionales y extremeños, mientras que desde la Junta declaran que entienden la preocupación y les ratifican su apoyo como sector líder.
Un sector que es vital para Extremadura puesto que cuenta con una superficie de 21.382 hectáreas, lo que representa casi el 25 % del total nacional. La producción total llega a algo más de 160.000 toneladas.