La Covid-19 vuelve a entrar en las residencias de mayores de la región tras más de 5 meses limpias, desde el pasado mes de marzo. Concretamente son 14 los centros sociosanitarios afectados con más de 130 casos activos.
Desde el Sepad están preocupados porque además el virus sigue cobrándose vidas en esta 5ª ola, nueve personas han perdido la vida desde junio, cinco de ellas en las últimas 48 horas. Jose Vicente Granado, director gerente de SEPAD espera no tener que volver a prohibir las visitas y ni tampoco cerrar las residencias.
La letalidad en los centros de mayores durante la tercera ola fue del 20%, ahora es del 5%. Así lo exponen desde la Asociación de Residencias Privadas de Extremadura, Asorex, quienes también están "preocupados" por la situación y aseguran que "todas las medidas de higiene y seguridad que tomen son pocas", aunque tampoco son partidarios de "eliminar las visitas". Juan Manuel Morales, su presidente, dice que ya ha pedido a la Junta "que se realicen serologías a trabajadores y usuarios para conocer el grado de inmunidad y saber si es necesaria la tercera dosis de la vacuna".
El COVID volvió a entrar en las residencias el pasado 20 de julio, fue en Santa Teresa de Jornet, en Don Benito y los dos últimos centros en comunicar brotes han sido los Pisos Tutelados de Cañamero, donde se han infectado 11 personas y hay otras 41 en vigilancia. Los mismos contactos estrechos se han producido en la Residencia de La Pesga, donde hay ya 20 positivos entre trabajadores y usuarios.