El turismo aguanta en Semana Santa a pesar del viento y la lluvia de la borrasca Nelson con un dato de ocupación para toda Extremadura de entre el 70 y el 80 por ciento, según la Confederación Empresarial de Hostelería y Turismo de Extremadura.
Los empresarios del sector creen que se trata de "una cifra positiva" teniendo en cuenta las circunstancias, pues dicen que las reservas están experimentando mucha variabilidad debido a decisiones de última hora por la inestabilidad meteorológica, en algunos casos por la lluvia y las cancelaciones de procesiones, pero también por el viento que dificulta los desplazamientos y por lo tanto lleva a cambiar los planes de viaje.
Sin embargo, la ocupación se mantiene en niveles altos, entre otras razones, porque el tiempo no acompaña para el turismo de playa y, por lo tanto, el turismo de interior no tiene esa competencia tan directa.
En el caso del turismo rural, el dato es mejor, un 84 por ciento de ocupación, con algunas cancelaciones en los últimos días que, desde la Federación Empresarial Extremeña de Turismo Rural cifran en el 2 por ciento, y a las que les restan importancia.
Alternativas frente a la lluvia
La lluvia y el viento de la borrasca Nelson no desanima a los turistas que buscan otras alternativas para ocupar sus días de vacaciones.
Por eso el Museo Nacional de Arte Romano de Mérida se convierte estos días en un buen resguardo, al igual que otro referente cultural de la región, el Museo de Arte Contemporáneo Helga de Alvear, en Cáceres.
Otras viajeros y familias optan por los centros comerciales y el cine para disfrutar de estos días de Semana Santa.