La consejera de Administración Pública y Hacienda, Pilar Blanco-Morales, ha defendido que el proyecto Presupuestos Generales para 2022 (PGEx) construirá una Extremadura "más resiliente" y atenderá las necesidades de los ciudadanos mediante el "potencial transformador" de los fondos europeos.
Son unos presupuestos que responden "a los efectos imprevisibles y devastadores" de la pandemia, ha subrayado la también vicepresidenta primera ante el Pleno de la Asamblea, que este jueves celebra el debate de totalidad del proyecto de ley regional, al que PP y Cs han presentado una enmienda conjunta a la totalidad del texto.
Durante su defensa, ha mostrado "voluntad de diálogo y consenso" con todas las fuerzas políticas para aprobar unas cuentas que ascienden a 7.000 millones de euros, un 9 % más, que se han elaborado desde el "realismo" y la "determinación", y que demuestran "que es posible afrontar la crisis de otra manera".
Lo ha hecho convencida de que "son las cuentas que necesita Extremadura", para contribuir también a superar las desigualdades y mejorar la cohesión social, y que cumplen también con la responsabilidad fiscal, asumiendo la tasa de referencia del déficit -no objetivo de déficit-, que se sitúa en el 0,6 %, según ha expuesto.
No obstante, Blanco-Morales ha expresado el compromiso de "volver a una senda de estabilidad prudente" en la medida en que se logre la recuperación y crezca el PIB y, en este punto, ha señalado que Extremadura es la quinta comunidad autónoma con menor nivel de deuda, un instrumento que se gestiona "de modo prudente" para sufragar las políticas, según ha dicho.
Por ello ha criticado tanto a PP y Cs por acusar al Ejecutivo regional de disparar la deuda y ha acusado a ambas formaciones de haber empleado las "mañas del tahúr" para argumentar su rechazo a un presupuesto "que ni les importa porque no les importa el futuro de los extremeños".
Ha acusado además al presidente del Grupo Popular, José Antonio Monago, de no ser un ejemplo para la contención de la deuda dado que el 32 % de la pendiente a cierre de 2020 era fruto de su "pésima gestión" en su etapa como presidente de la Junta.
Asimismo, la consejera de Hacienda ha recriminado a las dos formaciones haber construido su enmienda sobre el desconocimiento y el "artificio" aludiendo a una nula ejecución del presupuesto de 2021 cuando, ha subrayado Blanco-Morales, el grado de cumplimiento superará el 90 por ciento.
Al margen de ello, ha expuesto que las cuentas están asentadas en unas previsiones macroeconómicas "sólidas y prudentes", con una estimación del crecimiento del PIB extremeño de entre un 6 % y un 7,1 %, y del empleo de entre un 2,2 % y un 2,7 %.
Ha recalcado que se consigna los recursos necesarios para implementar medidas que ayuden a fortalecer la estructura productiva, dinamizar el mercado laboral, hacer efectiva la igualdad y combatir el reto demográfico sobre el refuerzo del Estado del Bienestar.
Se pretende, ha remarcado, "que nuestra región dé un salto cualitativo, que esté preparada para afrontar un futuro que estará marcado por la transición digital, verde e igualitaria".
Todas las políticas se materializan en el "potencial transformador" de este presupuesto que, ha insistido, "quiere potenciar un cambio de escenario" en el que las empresas hayan superado la crisis, el Estado del Bienestar se haya beneficiado de las mejoras implantadas, con unas infraestructuras más sostenibles y una administración y una sociedad más digitales.
"Todos estamos convocados a esta tarea, todos estamos convocados a responder a los problemas de los extremeños", ha manifestado la vicepresidente segunda de la Junta, que ha invitado a PP y Cs a realizar una lectura "serena" del proyecto de ley presupuestario.
Todo ello, ha añadido, para que "con la visión crítica que como oposición les corresponde", se pueda mejorar unos presupuestos "que son los que los extremeños necesitan y que probablemente con sus ideas podamos todavía hacerlos mejores".