Eva María Pérez, natural de Aceuchal, es residente en la isla de La Palma desde hace 8 años. Desde allí ha vivido la evolución del volcán Cumbre Vieja.
Asegura que lo ha vivido con bastante tensión. Entiende que las informaciones han llegado a cuentagotas para no alarmar a la población, pero ella y sus hermanos en Extremadura han estado en contacto permanente para tranquilizar a la familia.
Camino del mar
Mientras, el volcán continúa con su paso imparable. Más de 5.500 personas han sido evacuadas, y 130 casas han sido devoradas por el avance de los restos volcánicos. La lava fluye por nueve bocas, avanza a 300 metros por hora. A este ritmo, la lava podría penetrar en el mar esta misma noche.