"Un año más, por segunda vez, ante ti Ceres, honrando el teatro, esta vez con Ifigenia", así entra Eva Romero en el Teatro Romano de Mérida. Al momento se encuentra con Silvia Zarco, ambas son la directora y autora del texto que se pone en pie estos días en el Festival de Teatro. Ya estuvieron juntas hace tres años, cerrando el Festival con otra obra, 'Las suplicantes'. Ahora de nuevo han emprendido camino juntas, porque son muchas las palabras que tienen que ver la luz.
En una conversación entre ambas, Silvia subraya, "Ifigenia, esa muerte violenta de una mujer en la literatura occidental". "Ya era hora, después de 70 años sin que se nombre a Ifigenia", continúa Eva.
¿Cómo se siente la dramaturga cuando ve su obra en el escenario? "Siempre lo digo, creo que los autores de texto dramático tenemos una suerte enorme de ver encarnados nuestras palabras y nuestros textos en esos cuerpos, en esas voces de actores y actrices".
Para Eva "el trabajo con el equipo ha sido apasionante, sobre todo, partiendo de un texto tan rico y lleno de matices... Es un gustazo trabajar con ellos como directora. Todavía los actores me preguntan de ayer a hoy qué me ha parecido esa frase que han dicho".
A la hora de destacar determinadas escenas, entre tantas, Silvia nos habla del momento en que Ifigenia le dice a su madre Clitemnestra... "por fin madre se acabó tu silencio, se acabó tu culpa eterna, la luz es nuestra". Para Eva, "cuando Agamenón le está enseñando a Ifigenia el ejército de hombres armados y le dice que piden su carne. Me conmueve, pienso en todos los niños en Gaza diciendo... yo qué tengo que ver con esto".
Para Silvia es fundamental "arrancar esa maya de invisibilidad y silencio que nos atrapó a lo largo de los tiempos. Es un compromiso que tenemos", así lo están haciendo, involucrándose en los mensajes que lanzan.
"Superorgullosas de que se escuche 'Ifigenia' bajo el manto de la diosa Ceres y de que el público absuelva a Clitemnestra de la culpa con su aplauso", dice Eva. "Va por ellas y por todas", responde Silvia.