El olivo es un árbol de gran interés para la economía extremeña, pero también para la cultura y la ecología. Tiene un papel destacado en nuestras vidas, y cada 26 de noviembre se celebra su día mundial. Una jornada aprobada por la Unesco, que también pone en valor el aceite como símbolo de salud y sabor.
Un día que se celebra justo ahora que la campaña de la aceituna para aceite coge ritmo en Extremadura. La producción de aceite de oliva esta campaña en Extremadura se prevé que esté en torno a las 70.000 toneladas, prácticamente el doble que el año pasado. Cabe recordar, eso sí, que la de 2022 fue una campaña muy corta en producción.
Estos días comienza a recogerse la aceita para almazara en los olivares de la región con una calidad muy buena, aseguran los productores aunque, eso sí, con unos rendimientos muy bajos: sobre el 13% frente al habitual del 18 o 20%. Las lluvias del otoño han ayudado al engorde de la aceituna pero en proporción, el aceite obtenido, no va a ser tanto.
El sector espera que los precios tan elevados del aceite se trasladen también a los de la aceituna y puedan obtener los agricultores un precio razonable y cubrir costes de producción.