"Una cosa es negociar y escuchar, y otra muy distinta es mercadear con la ilusión de Extremadura". Con estas palabras ha iniciado María Guardiola su comparecencia, al término de la sesión en la Asamblea en la que se ha puesto de manifiesto la falta de acuerdo entre PP y VOX.
Guardiola ha recordado que el PP tiene 28 diputados, y VOX sólo 5. Por eso señala que "el rol adecuado a sus resultados es apoyar al PP, y no al revés".
"He intentado por todos los medios" llegar a un acuerdo, ha asegurado, pero "no voy a regalar consejerías ni voy a entrar en batallas culturales que están superadas".
"Creo en una Extremadura inclusiva, moderna, respetuosa, permeable, solidaria, responsable y por supuesto donde el amor no admita matices", ha dicho.
Ayer a última hora ofrecieron una última propuesta, donde además de la presidencia de la Asamblea, añadían una secretaría en la mesa de la Asamblea y también el senador autonómico que corresponde al PP, "pero no les interesaba y no les ha parecido suficiente", ha explicado.
"Iremos a elecciones, si hay que ir, y volveremos a demostrarles a los extremeños que tenemos palabra", ha remachado.
Y por último ha remarcado: "Yo no puedo dejar entrar en el gobierno a aquellos que niegan la violencia machista, a quienes usan el trazo gordo, a quienes están deshumanizando a los inmigrantes y a quienes tiran a una papelera la bandera LGTBI".